Juguetes sexuales para mujeres

¿Qué es exactamente un juguete sexual para mujeres?

Los juguetes sexuales para mujeres son aparatos diseñados para aumentar el placer femenino tanto a solas como durante las relaciones sexuales. Hay varios estilos de juguetes, como vibradores bala, vibradores conejito, succionadores de clítoris, masajeadores de clítoris, vibradores para el punto G y aparatos de Kegel.

¿Qué tipo de juguetes sexuales para mujeres existen en el mercado? 

Pequeños y discretos vibradores bala, potentes e intensos masajeadores de varita, vibradores conejito que te ofrecen el doble de placer estimulando a la vez el punto G y el clítoris, vibradores vaginales clásicos, estimuladores del punto G, aparatos anales revolucionarios y bolas chinas y de Kegel diseñadas para fortalecer los músculos del suelo pélvico y mejorar el placer sexual, o para mejorar el control de la vejiga.

¿Cómo elegir el que mejor se adapta a cada una?

La verdad es que es una pregunta difícil. Antes de empezar y tomar una decisión, tienes que saber lo que necesita tu cuerpo y lo que deseas sentir o explorar. ¿Quieres un juguete para compartir el placer sexual con tu pareja o solamente lo quieres para ti? Tienes que pensar en qué zona quieres estimular, qué material quieres usar, qué modos de vibración deseas utilizar... Te recomendamos que busques información en Internet sobre los distintos juguetes sexuales para que puedas averiguar qué idea excita. Se trata de ti y de tu placer sexual, así que no dudes en probar tantas opciones como quieras.

¿Qué beneficios aporta usar un juguete sexual?

Aprenderás más sobre tu cuerpo, mejorarás tu experiencia sexual, disfrutarás más, le darás un toque picante a tu vida sexual e impresionarás a tu pareja. Es una forma genial de aliviar el estrés, tu piel tendrá un aspecto increíble, tu cuerpo estará satisfecho... ¿Te hace falta algo más?

¿Cómo limpio el juguete sexual y dónde lo escondo?

Limpia el juguete después (y antes) de cada uso. Puedes usar un limpiador especial para juguetes sexuales o agua templada y un jabón suave. Sigue las instrucciones del fabricante y cuida tu juguete igual que cuidas tu cuerpo. Se trata de tu salud, así que no juegues con la limpieza (¡no te la saltes!). En cuanto a dónde esconderlo, creemos que no hay por qué hacerlo. Tenlo a buen recaudo en su caja y fuera del alcance de otras personas, pero solo por una cuestión de intimidad e higiene. No tienes por qué esconderlo ni sentirte avergonzada de usar un juguete sexual. Si hablas de ello abiertamente (con tus parejas y amigos), liberarás tu mente, un paso muy importante a la hora de liberar tu cuerpo y tu propio placer.